Los números
Superficie 75.2 km² (Gobierno de Puerto Rico)
Habitantes 11,937 (2016, estimado del Censo)
Dato85 refugiados
Dato3,600 compras entregadas en la primera semana
María barrió con lo que dejó en pie el huracán Irma
Una comunidad quedó borrada del mapa y otra quedó bajo agua tras el paso del potente ciclón
Los estragos causados por el embiste del huracán Irma, a principios de septiembre de 2017, en el municipio costero fueron solo el ensayo de lo que se viviría con el paso del huracán María dos semanas después.
“Fue una pesadilla. Los vientos asustaron hasta al más bravo de este pueblo”.
Según el ejecutivo municipal, todo quedó destrozado. “Estaba aquí con mis papás y pasamos un susto brutal. Esa puerta reventó y ese viento furioso se metió por ahí pa’rriba causando estragos en mi oficina y en otras áreas”, dijo sobre la casa alcaldía y la “hecatombe” que quedó.
Así mismo, destacó que colapsaron tres canchas bajo techo y que muchas estructuras quedaron “inservibles”.
De los sectores más afectados del municipio afirmó que fueron Las Vegas y Punta Figuera.
“Las Vegas quedó completamente bajo agua. El río Blanco cruzó por el mismo medio de la urbanización. Allí tuvimos gente que se trepó a los techos a pedir auxilio. Gracias a Dios nadie resultó con daños graves”, afirmó.

Una de las viviendas afectadas por el huracán María y sus vientos en Ceiba.
En el Punta Figuera, las 49 estructuras – algunas residenciales y otros talleres de pesca- quedaron borradas del mapa. Una de las afectadas fue Aleida M. Rivera, quien perdió su casa, que le costó 25,000 dólares.
“Punta Figuera ya no existe, pero lo vamos a levantar con nuestro propio esfuerzo. Ya lo hemos hecho antes”, afirmó Aleida, de 58 años y residente del lugar hace 11. “Yo lo perdí todo. Aquí no queda nada. Lo poco que recuperé ya lo tengo que botar porque se sigue mojando. No para de llover y hoy fue que pude conseguir un toldo de esos que da el municipio a ver si lo puedo enganchar”, sollozó.
De otro lado del pueblo, el Centro de Usos Múltiples no solo se convirtió en el centro de acopio municipal, sino que se transformó en el lugar donde toda operación de recuperación se llevó a cabo.
Desde tempranas horas de la mañana, militares se movilizaban con cargamento, daban un ‘briefing’ de lo que se esperaba lograr en el día y de ahí salían cientos y cientos de voluntarios a recorrer las zonas del pueblo para repartir alimentos, agua y otros artículos de primera necesidad.

Una de las instalaciones deportivas del municipio de Ceiba destruidas por el huracán María.

Un vecino camina por las calles de Ceiba, de cara a los daños que dejó el huracán María en ese municipio.
“Esto ha sido un esfuerzo de todos. Llega gente no solo de Ceiba, pero de Fajardo y Luquillo también para buscar o repartir las cajas que hemos preparado con la ayuda de la Guardia Nacional”, comentó la ayudante especial del alcalde, Neyssa Simonoff.
“En la primera semana luego del huracán dimos 3,600 compras casa por casa. Tenemos para seguir rellenando. Hemos recorrido todos los campos y las urbanizaciones, ya listos para comenzar la segunda ronda.”, puntualizó Cruz, quien destacó que el gobernador de Texas, Grege Abbot, y el de Nueva York, Andrew Cuomo, enviaron aviones con suministros específicamente para Ceiba tan pronto pasó la tempestad.
Del mismo modo, Cruz destacó que poco a poco el refugio que se había habilitado pasó de tener unas 85 personas a 37 en los primeros días.
“Espero que la vida cotidiana de los ceibeños se reestablezca dentro de uno o dos meses, pero ya se ha normalizado lo que es el recogido de basura y escombros. Dentro de tres semanas espero que tengamos luz”, estimó a la vez que puntualizó que se tardaría poco más de un año lograr reconstruir la infraestructura que perdió el municipio. Más de un mes después de María, el 31 de octubre de 2017, solo el casco urbano de Ceiba tenía luz.
Mucha tristeza y desesperanza entre residentes de Ceiba.